Y esto lo dicen muchos grandes empresarios,
cito a algunos:
Juan
Roig de Mercadona: “El jefe es el cliente”
Sam
Walton de
Walmart “no existe más que un jefe, el cliente, él puede despedir a todos en la
empresa desde el portero hasta al gerente
Henry
Ford, “No es el jefe el que paga los salarios,
los jefes sólo administran el dinero, quien paga el salario son los clientes”
El maestro Steve
Jobs decía que
había que tratar de superar las expectativas de nuestros clientes.
El cliente
muchas veces no sabe bien lo que quiere, y somos nosotros quienes tenemos que
mostrarle varias opciones.
Buscando la rentabilidad en nuestros clientes.
Algo común en todas las organizaciones es que el 20% de
nuestros clientes nos generan el 80% de nuestros beneficios, y aquí no hablamos de ventas, si no de beneficios. Y muchos de ese 80% de clientes que nos
producirá el 20% de nuestros beneficios, nos hace perder mucho tiempo valioso. ¿Qué podemos hacer?. Muchas veces es mejor dejar de atender a esos clientes que nos hacen perder el tiempo y focalizarnos en darles a nuestros clientes VIP (ese 20%) mejores servicios o
tratar de conseguir nuevos clientes que nos aporten rentabilidad.
Puede parecer esta afirmación dura, pero es de sentido común; hay
que analizar a nuestros clientes y tomar este tipo de acciones, seguro que
haremos más rentable a nuestra organización.
¿Qué es satisfacer a nuestros clientes?
Es generar una relación de confianza con ellos,
es cumplir con lo prometido, es ir más allá de cumplir con sus
expectativas que tenían con nosotros, ofrecerles un trato
personalizado y hacer una relación diferencial, darles un trato especial; mimarles, ofrecerles más de lo que ellos mismos nos piden.
Si somos capaces de darles todos esto a nuestros clientes
estaremos consiguiendo unos clientes fieles de por vida; siempre y cuando nunca dejemos de darles todo lo que le beneficie.
Así pues no hay que olvidar que:
- El mayor patrimonio de la empresa son sus clientes.
- Hay que crear recursos para mantener ese patrimonio como el personal, la formación, el valor añadido, etc.
- Buscar siempre satisfacerles más allá de lo que ellos mismos esperan de tu trabajo.
La meta de la empresa es alcanzar la satisfacción de sus clientes.